Veinte mineros murieron y otros 23 quedaron atrapados a causa de una gran fuga de gas ocurrida hoy en una mina de carbón operada ilegalmente en el suroeste de China, en el segundo desastre en una mina de carbón en una semana, lo que elevó la alarma sobre la seguridad de las minas en el país.
Las máquinas de ventilación están extrayendo el exceso de gas metano del foso de la mina, en tanto que cientos de socorristas descienden por turnos para buscar a los mineros atrapados en la Mina de Carbón Sizhuang cerca de la ciudad de Qujing, provincia de Yunnan.
Funcionarios de seguridad en el trabajo dijeron que la mina privada, con una capacidad de producción anual de 90.000 toneladas, estaba operando sin licencia cuando ocurrió el accidente. La licencia de la mina fue revocada hace un año.
Una investigación preliminar mostró que la fuga de gas ocurrió en una plataforma dentro del tiro de la mina, pero que el gas se extendió a otra plataforma, en donde quedaron atrapados 43 mineros en las dos áreas alrededor de las 6:30 de hoy.
En lugar de una "fuga de gas", el gobierno municipal de Qujing dijo previamente que había ocurrido una "explosión de gas".
Luo Lin, director de la Administración Estatal de Seguridad Laboral, ordenó a las autoridades locales no escatimar esfuerzos para salvar a los trabajadores atrapados.
Zhao Tiechui, subdirector de la entidad, y Peng Jianxun, subdirector de la Administración Estatal de Seguridad en Minas de Carbón, partieron esta mañana rumbo a Qujing para supervisar las tareas de socorro.
La industria minera es un pilar de la economía de Shizong, que constituyó 65 por ciento de la producción industrial del distrito y contribuyó con un 54 por ciento al producto interno bruto el año pasado.
El yacimiento, operado por inversionistas privados, cuenta con una capacidad anual de producción de 90.000 toneladas.
El accidente fue el segundo desastre mortal en afectar al peligroso sector minero de China en una semana. El jueves pasado, un desprendimiento de rocas ocurrió en una mina de carbón en la provincia de Henan, centro de China, a causa de un sismo de 2,9 grados. Ocho mineros murieron y 53, incluidos 45 que quedaron bajo tierra durante 40 horas, fueron salvados.
Los socorristas que trabajan en Sizhuang esperan que pueda repetirse el milagro de sobrevivencia.
China depende enormemente del carbón para alimentar su enorme economía. Atraídos por la enorme demanda de energía, los jefes de minas con frecuencia obligan a los mineros a trabajar en condiciones que incumplen las normas de seguridad ordenadas por el gobierno.
Explosiones de gas, inundaciones e incendios ocurren frecuentemente en las minas de carbón de China, donde cada año mueren cientos de personas.
De acuerdo con datos oficiales, más de 2.600 personas murieron en accidentes en minas en el 2009, pese a un descenso estable en las muertes en minas en los años pasados gracias al reforzamiento de las medidas de seguridad y del cierre de muchas minas ilegales.
El primer ministro chino, Wen Jiabao, ordenó una vez a los gerentes de minas que pasaran cierto tiempo en las minas con sus trabajadores para que tuvieran una mayor conciencia sobre la seguridad en el trabajo. Fin
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