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miércoles, 14 de septiembre de 2011

Tendencias mundiales y desafíos de la seguridad y salud en el trabajo


Reproducimos una entrevista de OIT EnLínea con Seiji Machida, Director del Programa sobre Seguridad y Salud en el Trabajo y Medio Ambiente (SafeWork) de la OIT. Temas como los nuevos riesgos emergentes, la nueva lista de enfermedades profesionales, y las estrategias eficaces en materia de prevención son algunos de los temas abordados en la charla.
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    Seiji Machida
Un nuevo informe de la OIT, titulado “Tendencias mundiales y desafíos de la seguridad y la salud en el trabajo”, señala que el número total de accidentes mortales en el trabajo está disminuyendo. ¿Cuál es la razón?
Seiji Machida: Es notable que el número total de accidentes mortales, así como la tasa de incidencia de accidentes mortales, ha disminuido durante los últimos diez años. La razón se debe a que, durante las últimas décadas, se han producido importantes avances en materia de seguridad y salud laboral, gracias a que muchos más países se han dado cuanta de la importancia y de la necesidad de darle una mayor prioridad a la prevención accidentes y problemas de salud en el trabajo. Si bien esta es una buena noticia, debemos también admitir que cerca de 2,34 millones de personas murieron como consecuencia de accidentes y enfermedades relacionados con el trabajo en 2008. Una cifra tan alta simplemente no es aceptable en la actualidad, ya que equivale a un promedio de más de 6.300 muertes diarias relacionadas con el trabajo en el mundo.

¿Puede darnos un ejemplo concreto de una estrategia eficaz en materia de prevención de accidentes y enfermedades en el trabajo?

Seiji Machida: La cuestión continúa siendo cómo alcanzar una correcta cultura de prevención a nivel nacional para proteger a todos los trabajadores, en todos los sectores de empleo. Para que los programas de SST sean exitosos a nivel de la empresa, resulta esencial que exista un compromiso en la alta gerencia y una participación activa de los trabajadores. Igualmente, a nivel nacional, se precisa un alto grado de compromiso al respecto y la participación activa de todas las partes involucradas, especialmente de los mandantes sociales (trabajadores y empresarios y sus respectivas asociaciones), en el desarrollo de programes y estregáis efectivas de carácter nacional. Con tal grado de compromiso, y con las normas internacionales de trabajo de la OIT como guía, todos los lugares de trabajo y todos los países deberían poder encontrar una manera eficiente de mejorar continuamente sus programas de prevención.

¿Cuáles son algunos de los nuevos riesgos emergentes en materia de seguridad y salud de la actualidad?

Seiji Machida: Los nuevos y emergentes riesgos en el mundo del trabajo han sido foco atención durante los últimos años. Por ejemplo, los nuevos procesos de producción que utilizan nanotecnología y biotecnología se están expandiendo cada vez más en todo el mundo. Se estima que para 2020 aproximadamente, el 20 por ciento de todos los productos se basarán en parte en el uso de la nanotecnología. Desafortunadamente, aún se desconoce en gran parte el impacto a largo plazo de estos nuevos materiales sobre la salud humana y del ambiente. Las nuevas formas de empleo, como por ejemplo la terciarización y el trabajo temporal o a tiempo limitado, han inevitablemente impactado sobre las condiciones de trabajo y, por lo general, han contribuido a aumentar el estrés, la depresión, el uso de alcohol y drogas, e inclusive el suicidio relacionados con el trabajo, todo lo cual puede empeorar en tiempos de crisis económica mundial.

Además, los llamados empleos verdes, que han recibido un fuerte empuje durante los últimos años, deben ser examinados desde una perspectiva de seguridad y salud laboral para asegurar que estos nuevos tipos de trabajo sean evaluados correctamente y se tomen las medidas de prevención necesarias. Por ejemplo, los trabajos vinculados a la generación de energía eólica precisan medidas de seguridad para el trabajo de construcción y mantenimiento en altura.

¿Qué está haciendo la OIT para responder a estos nuevos desafíos?

Seiji Machida: Puesto que las condiciones de los lugares de trabajo están en continua transformación, las medidas de seguridad y salud en el trabajo necesitan ser adaptadas paralelamente. A pesar de los progresos en relación de la gestión de la SST en muchos países, aún existe una necesidad urgente de fortalecer los sistemas y programas en materia de SST nacionales para que estos reflejen los principios establecidos en las principales normas internacionales del trabajo de la OIT. Es por este motivo que el Consejo de Administración de esta Organización adoptó un plan de acción en marzo 2011, destinado a alcanzar una ratificación amplia y una implementación efectiva de los instrumentos fundamentales de la OIT sobre SST. La OIT y sus mandantes están realizando ulteriores esfuerzos para integrar la SST en los Programas de Trabajo Decente por País (PTDP), que puede ser considerado como el principal canal de distribución de la ayuda de la OIT a los países.

¿Cuáles son los principales objetivos estratégicos del futuro?

Seiji Machida: Una de nuestras principales tareas es continuar promoviendo una cultura mundial de prevención a favor de la seguridad y la salud. Queremos que la seguridad y la salud se encuentren entre las prioridades de las agendas nacionales, y queremos aumentar la concienciación y la comprensión de la función y utilidad de un enfoque sistemático de gestión de la SST. Una cultura preventiva en materia de seguridad y salud involucra a todas las partes interesadas y responsables de la protección de los trabajadores y de la prevención de las enfermedades profesionales y de los accidentes en el trabajo. En segundo lugar, el plan de acción que mencioné antes tiene por objetivo mejorar la situación, tanto a nivel nacional como en el lugar de trabajo, sobre las bases de los principios y buenas prácticas formulados en las normas de la OIT. Debería prestarse atención especial a los sectores particularmente peligrosos, como la construcción, la minería, la agricultura y la economía informal, así como a las necesidades de las pequeñas y medianas empresas (PYME). En tercer lugar, continuaremos con el proceso de desarrollo de capacidades, que permite a las autoridades nacionales, y a las organizaciones de empleadores y de trabajadores, elaborar o mejorar sus sistemas nacionales de seguridad y salud en el trabajo.

La OIT hace poco publicó una nueva lista de enfermedades profesionales ¿Cuál es la novedad de esta lista?


Seiji Machida: La nueva lista es la versión revisada de la lista anexa a la Recomendación sobre la lista de enfermedades profesionales (No. 194, 2002). Fue revisada por un comité tripartito de expertos que tomó en cuenta los más recientes avances científicos y tecnológicos. Es una referencia internacional para la prevención, registro, notificación e indemnización relacionados a las enfermedades profesionales. Esta lista revisada incluye por primera vez los trastornos mentales y del comportamiento, así como el estrés postraumático. Esto representa un paso muy importante hacia el reconocimiento del vínculo directo entre la exposición a los riesgos psicológicos en el lugar de trabajo y los trastornos mentales.

¿Las empresas están reduciendo los fondos destinados a la seguridad y salud en el trabajo en tiempos de crisis?


Seiji Machida: En efecto, algunas empresas consideran que reducir los fondos destinados a la seguridad y salud les permitirá ahorrar dinero a corto plazo, pero si las empresas efectúan reducciones ahora, pagarán el precio en el futuro. Ha sido claramente demostrado que los costos totales de los accidentes y las enfermedades con frecuencia son mucho mayores de lo que se percibe en un primer momento. Por el contrario, invertir en seguridad y salud reduce los costos directos e indirectos, la prima de seguro y el ausentismo, y mejora la moral de los trabajadores, el rendimiento y la productividad. Por lo tanto, la situación actual no debería servir de excusa para reducir los esfuerzos en este campo. La prevención es buena para los negocios. A largo plazo, las inversiones en la salud física y mental de los trabajadores son rentables. Puesto que trabajamos durante más tiempo que las generaciones anteriores, tenemos que garantizar que nuestro bienestar nos permita hacerlo. Si fracasamos ahora en invertir en una fuerza de trabajo saludable, en el futuro careceremos de un personal saludable. Tratar de ahorrar dinero en esta área producirá además una carga adicional en, por ejemplo, los sistemas nacionales de seguridad social.

¿Cuáles son los próximos pasos de la OIT para hacer frente a los futuros desafíos en materia de SST?


Seiji Machida: A través de sus actividades de cooperación técnica, la OIT ofrecerá formación para el fortalecimiento de los sistemas nacionales de SST, incluyendo la mejora del registro y notificación de accidentes y enfermedades profesionales. Existe una carencia de datos estadísticos confiables en relación a la eficacia de los sistemas de SST nacionales y al número y naturaleza de los accidentes y enfermedades relacionados con el trabajo. Nuestro objetivo es apoyar el perfeccionamiento de los sistemas de recolección de datos existentes, de manera que puedan ser utilizados, entre otras cosas, para medir el progreso en las estrategias de prevención, tanto a nivel nacional como empresarial. Nuestras actividades de concienciación incluirán la preparación de materiales de información en diversos idiomas para la campaña del anual “Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo” y, por supuesto, la organización del Congreso Mundial con nuestros principales socios.
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