Se presumía que no iba a ser trascendental, pero no se contemplaban síntomas de fracaso tan pronto.
La Cumbre de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP 18), que se desarrolla en Doha (Catar), completará este jueves cuatro días de unas discusiones que se prolongarán hasta el próximo 7 de diciembre.
Y sin completar una semana, la reunión, que busca lograr un acuerdo para reducir las emisiones de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero, con tal de que el cambio climático no consiga aumentar la temperatura promedio global por encima de los dos grados centígrados, ya muestra síntomas de fracaso.
Se presumía que la Cumbre de Doha no iba a ser trascendental, pero tampoco estaba en los planes que se desinflara tan pronto. Frente al reto de extender el Protocolo de Kioto, que expira el 31 de diciembre, y que obligaría a los países desarrollados a reducir bajo normas legales sus emisiones contaminantes, sólo la Unión Europea, Suiza y Noruega expresaron su intención de participar en una extensión de este acuerdo. Pero otros países clave, como Canadá, Japón, Rusia, China y EE. UU, ya anunciaron que no firmarán compromisos nuevos a partir de esa fecha.
China y Japón llegaron incluso con posiciones enfrentadas, porque mientras el gigante asiático defiende que los países desarrollados, Japón entre ellos, deben tener obligaciones concretas de reducción de emisiones, Japón reniega del Protocolo que lleva el nombre de su antigua capital imperial (Kioto), al que no considera justo ni efectivo, y está en Catar diciendo que no aceptará propuestas de reducción.
Esta falta de intenciones implica que, por el momento, los países que tomarían parte en una potencial extensión de un Protocolo de Kioto, o de un Kioto 2 como algunos lo han bautizado, sólo generan un 15 por ciento del total de emisiones contaminantes mundiales.
En medio de esa falta de interés, justificada en el caso de EE. UU. por la crisis económica, que según sus representantes no da margen de maniobra para que la industria invierta en soluciones sostenibles, aparecen África y América Latina, cuya función en esta reunión, en la que participan delegados de casi 200 países, se ha limitado a pedirles a las naciones desarrolladas y causantes del cambio climático, apoyo para adaptarse.
Precisamente, Doha tendrá al menos que definir la captación de fondos para sustentar el Fondo Verde para el Clima, creado en la cumbre del año pasado en Durban (Suráfrica) y que pretende proporcionar 100.000 millones de euros a países pobres, a partir del 2020, para afrontar los estragos del cambio climático.
Esta falta de determinación y de resultados se produce en medio de informes de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) que advierten que el 2012 será nuevamente uno de los años más cálidos desde el siglo XIX.
"El cambio climático se proyecta ante nuestros ojos" dijeron hoy voceros de la organización, que destacaron hechos como el derretimiento del Ártico, eventos climáticos extremos como el Niño o la Niña (que se repiten con frecuencia) y el crecimiento del nivel del mar, que ha hecho que huracanes como Sandy sean mucho más impactantes, como algunos de lo principales ejemplos de que la Tierra se ha vuelto un lugar cada vez más vulnerable.
REDACCIÓN VIDA DE HOY
___________
http://www.eltiempo.com/vida-de-hoy/ecologia/ARTICULO-WEB-NEW_NOTA_INTERIOR-12405940.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario